A fines de septiembre se anunciaba la llegada de un nuevo club de lectura. Ya sabía yo de la existencia de otros en los que se paga una cuota mensual para recibir un libro o en los que hay reuniones presenciales para compartir la experiencia de una novela.
En este caso la metodología es más curiosa: cada mes se acompaña la lectura de un libro a través de un mail semanal. La suscripción es gratuita. Sólo hay que tener el libro de antemano; comprado o prestado, va en cada uno.
El responsable de Club Carbono es Sebastián Lidijover, quien trabajó durante muchos años en el sector de prensa de una importante editorial, y las lecturas son de emprendimientos más independientes como Sigilo, Gourmet Musical o Ediciones Godot, por nombrar los ejemplos del primer trimestre.
Si les tienta, busquen Club Carbono en redes sociales y sumérjanse en la experiencia. De los tres libros que se leyeron hasta ahora, leí dos y los recomiendo fervorosamente: “Mi abandono”, de Peter Rock, y “Cometierra”, de Dolores Reyes.